Hasta el día de hoy, son 11 las personas condenadas en nuestro país a la pena máxima:
• David Oubel. Fue el primer hombre en ser condenado a prisión permanente revisable, el 6 de julio de 2015. Asesinó a sus dos hijas con una sierra radial y un cuchillo de cocina, tras haberlas degollado para que no pudieran defenderse.
• Sergio Díaz. En 2016 mató al abuelo de la que entonces era su novia, un hombre que estaba en silla de ruedas por una discapacidad severa. Fue el primer caso revisado por el Tribunal Supremo y que fue revocado.
• Daniel Montaño. Arrojó a una niña de 17 meses por la ventana de un primer piso, alegando posteriormente que fue a causa de un brote psicótico, aunque no le sirvió para escapar de esta medida.
• Marcos Miras. El Día de la Madre de 2017, Marcos asesinó a su propio hijo dándole golpes con una pala. También afirmó tener problemas psicológicos para evitar la pena, sin resultados.
• Patrick Nogueira. Recibió tres condenas a prisión permanente revisable, aunque el Tribunal Supremo anuló dos de ellas. Asesinó a sus tíos y a sus dos primeros pequeños en septiembre de 2016.
• Pablo Catalán. Catalán violó y estranguló a una mujer inconsciente en su propia casa, convirtiéndose así en el primer caso de la aplicación de la pena por el supuesto de asesinato tras agresión sexual.
• Enrique Romay. Acuchilló a una mujer que opuso resistencia al intentar violarla en marzo de 2017.
• Francisco Salvador. Fue el primer condenado en un caso de violencia de género. En 2017 agredió sexualmente y golpeó a su ex pareja hasta la muerte.
• Rafael García. Asesinó a su mujer, discapacitada y en silla de ruedas, propiciándole más de 20 cuchilladas y cometiendo el delito delante de la madre de ella y de un sobrino.
• Roberto Hernández. Acusado de violar a una niña de 4 años y asesinarla después con golpes brutales.
• Ana Julia Quezada. Como decíamos, ha sido la primera mujer en recibir esta pena. Asesinó al hijo de su pareja, Gabriel Cruz, en febrero de 2018, convirtiéndose en un caso de lo más sonado en todo el país.