De hecho, desde que empezó la
pandemia,
el phishing ha crecido un 220 %, a través de correos electrónicos y mensajes de texto. Pero…
¿En qué consiste la suplantación de identidad? Pues bien, en simular una identidad falsa para que la víctima acabe compartiendo información importante. Por ejemplo, ha ido circulando estas Navidades un mensaje, vía WhatsApp, en el que una identidad falsa que se hace pasar por el gigante de la e-commerce, Amazon, y acaba sacando dinero del banco, simulando una compra.
No cabe duda de que el
phishing ha sido el ciberataque más peligroso en este último año. Por lo que es fundamental protegerse de este ataque, siguiendo algunas
reglas básicas: no abrir correos o mensajes desconocidos, informarse previamente con la empresa para confirmar si proviene de esta o no, etc. ¡Es crucial siempre tomar una
actitud preventiva ante cualquier mensaje o email recibido, y seguir los pasos de manera cautelosa que te harán estar seguro o no de la fiabilidad de esta información!